Ayer, Efemérides de la Ley de Exclusión China
Los políticos nacionales manipularon a los trabajadores blancos para obtener ventajas electorales?
Un acontecimiento desgraciado tuvo lugar, que se ha señalado también en una famosa serie de Netflix:
En este Día de 6 Mayo (1882): Ley de Exclusión China
Tal día como hoy de 1882, el presidente estadounidense Chester A. Arthur firma la Ley de Exclusión China, la primera y única ley federal importante que suspende explícitamente la inmigración de una nacionalidad específica. En 1943 tuvo lugar la derogación de esta ley, que fue -como reconoce la Secretaría de Estado americana- una decisión casi totalmente motivada por las exigencias de la Segunda Guerra Mundial, ya que la propaganda japonesa hacía repetidas referencias a la exclusión de los chinos de Estados Unidos con el fin de debilitar los lazos entre Estados Unidos y China, que entonces era su aliada. (Imagen de Wikimedia)
La derogación de la exclusión china allanó el camino para que en 1946 se tomaran medidas para admitir a inmigrantes filipinos y asiático-indígenas. La exclusión de ambos grupos había perjudicado durante mucho tiempo las relaciones de Estados Unidos con Filipinas y la India. Finalmente, la exclusión asiática terminó con la Ley de Inmigración de 1952, aunque esa ley siguió el modelo de la cuota china y asignó cuotas raciales, no nacionales, a todos los inmigrantes asiáticos. Este sistema no terminó hasta que el Congreso suprimió por completo el sistema de cuotas por origen nacional en la Ley de Inmigración de 1965.
Algunos historiadores y juristas explican la adopción de la Ley de Exclusión China y otras leyes similares por el vasto movimiento antichino que se desarrolló en California durante la segunda mitad del siglo XIX. Los chinos habían sido una minoría significativa en la costa oeste desde mediados del siglo XIX. Al principio trabajaban en las minas de oro, donde les resultaba muy fácil encontrar oro. Sin embargo, se encontraron con la hostilidad de las autoridades y poco a poco se vieron obligados a abandonar la tierra y asentarse en zonas urbanas como San Francisco, donde a menudo se les confinaba a los trabajos más sucios y penosos.
Los estadounidenses occidentales persistieron en sus estereotipos de los chinos como seres degradados, exóticos, peligrosos y competidores por puestos de trabajo y salarios. El senador John F. Miller de California, partidario de la Ley de Exclusión China, afirmaba que los trabajadores chinos eran “como máquinas […], con nervios obtusos, pero poco afectados por el calor o el frío, ásperos, tensos, con músculos de hierro”. En parte como respuesta a este estereotipo, los sindicatos occidentales hicieron de la limitación de la afluencia de chinos a Estados Unidos uno de sus objetivos. En otras palabras, la exclusión fue el resultado del sentimiento popular antichino.
Otros investigadores han argumentado que la exclusión debe atribuirse a la política de arriba abajo y no al movimiento de abajo arriba, explicando que los políticos nacionales manipularon a los trabajadores blancos para obtener ventajas electorales. Otros han adoptado la “tesis del racismo nacional”, que hace hincapié en el racismo antichino endémico en la cultura nacional de la América primitiva.